martes, 15 de septiembre de 2009

Tour de Ultimación // expediente nº 097-12









Por entre las nubes -perfectas en su quietud vaporosa- el primer rayo de luz caía sobre la ciudad taciturna y reflejaba en el lívido rostro de Claudio (particularmente en sus pómulos sobresalientes del semblante) una mueca ajena, como de poseído. Así, la luz presolar nos descubría a los dos entrando por la puerta de su edificio. Usted se preguntara con lógica elocuencia ¿Con que propósito este hombre pudo soportar un amorío tan ridículo e incompatible? Aun no se si explicárselo señor, solo he elaborado una respuesta o un bosquejo de ella que, por rebuscada, no merece ser pronunciada. Aun no comprendo como amanecí en un lugar del que no fui arquitecto, en una cama desecha y kilométrica de sabanas celestes y decoloradas por el agua, el jabón y el sol; en ese cuarto diminuto en comparación con el lecho, blanquísimo y como encendido por la violencia lumínica sobre las paredes manchadas, sobre el aparador, en el piso de pinotea, sobre un libro aplastando a otro; esa luz que va llenando poco a poco la vacuidad de una taza con un saquito de infusión fermentado por la dejadez colgando de la asa mientras los pájaros explotan allá afuera. La luz violenta, ciega, la luz sobre todo: en mi tez parda y granosa. El sabor a ceniza muy picante en mi boca, sulfuraba mi paladar. Tenía sed. Todo un extraño suceso que no imaginaría jamás, ni un piso como ese ni la luz entrando al cuarto de esa manera. No llegué hasta ahí con mi consentimiento, eso lo sé, aunque es lo único en certidumbre. Y es cierto que planié llevarlo a su departamento y mutar en el déspota que él adora cuando juega a no darse vuelta, pero no así, no como parece haber sucedido. Nunca - créame - habría de diseñar mañana tan imperativa y confusa como la última.

11 comentarios:

Señor Posmópolis dijo...

¿Con que propósito este hombre pudo soportar un amorío tan ridículo e incompatible?


en el amor, en esa palabra, está la respuesta.

+ rocíorecaño dijo...

que lindos lugares quu hay ahi adentro.

Mr. P dijo...

en posmópolis todos nacemos noctámbulos hasta el día de nuestra real iniciaciación: prender cohetes y fuegos firotécnicos en la cancha. ahí es cuando venimos a la vida.

búlgaro dijo...

Entonces no me des un motivo por favor
No le des conciencia a la nostalgia,
La desesperación y el juego. Pensarte y no verte
Sufrir en ti y no alzar mi grito
Rumiar a solas, gracias a ti, por mi culpa,
En lo único que puede ser
Enteramente pensado
Llamar sin voz porque Dios dispuso
Que si El tiene compromisos
Si Dios mismo le impide contestar
Con dos dedos el saludo
Cotidiano, nocturno, inevitable
Es necesario aceptar la soledad
Confortarse hermanado
Con el olor a perro, en esos días húmedos del sur
En cualquier regreso
En cualquier hora cambiable del crepúsculo
Tu silencio Y el paso indiferente de Dios que no ve ni saluda
Que no responde al sombrero enlutado
Golpeando las rodillas Que teme a Dios y se preocupa
Por lo que opine, condene, rezongue, imponga. No me des conciencia, grito, necesidad ni orden.
Estoy desnudo y lejos, lo que me dejaron
Giro hacia el mundo y su secreto de musgo
Hacia la claridad dolorosa del mundo,
Desnudo, solo, desarmado
bamboleo mi cuerpo enmagrecido
Tropiezo y avanzo. Me acerco tal vez a una frontera
A un odio inútil, a su creciente miseria,
Y tampoco es consuelo
Esa dulce ilusión de paz y de combate
Porque la lejanía
No es ya, se disuelve en la espera
Graciosa, incomprensible, de ayudarme
A vivir y esperar. Ningún otro país y para siempre.
Mi pie izquierdo en la barra de bronce
Fundido en ella.
El mozo que comprende, ayuda a esperar, cree lo que ignora.
Se aceptan todas las apuestas:
Eternidad, infierno, aventura, estupidez
Pero soy mayor
Ya ni siquiera creo,
En romper espejos
En la noche
Y lamerme la sangre, pequeño dolor filoso.
Me aproximará lo que resta vivo, blando y ágil.
Muerto por la distancia y el tiempo
Yo la, lo pierdo, doy mi vida,
cambio de vejeces y ambiciones ajenas
Cada día más antiguas, suciamente deseosas y extrañas.
Volver y no lo haré, dejar y no puedo.
Apoyar el zapato en el barrote de bronce
Y esperar sin prisa su vejez, su amenidad, su diminuto no ser.
La paz y después, dichosamente, enseguida, nada.
Ahí estaré. El tiempo no tocará mi pelo,
no inventará arrugas, no me inflará las mejillas
Ahí estaré esperando una cita imposible,
un encuentro que no se cumplirá.

("La balada del ausente" de Juan Carlos Onetti)

Mr. P dijo...

hay que volver a boedo.

Espérame en Siberia dijo...

Muá :D

Anartista dijo...

hoy te recordé.

Mr. P dijo...

en posmópolis podemos hacer los actos más maravillosos como
copular telepáticamente, pero a la vez los actos más corrientes, comúnes o sin valor como las masturbaciones mentales XD

larga vida a posmópolis, larga vida a boedo!

Señor Posmópolis dijo...

Usted dice que se dedica al Sector Químico. Si lo nombro hoy Ministro del Sector Químico de Posmópolis, ¿cuáles serían sus primeras acciones, o inaccciones, al tomar el cargo?

Mr. P dijo...

después de extensos debates, deliberaciones y manifestaciones alrededor de la sede, el H. Congreso de Posmópolis lo ha designado como el nuevo y flamante (y también radioactivo) Ministro de la Secretaría del Sector Químico de Posmópolis... a partir del lunes usted podrá despachar en su nueva y flamante (y también radioactiva) oficina ubicada en la zona más aureal de Posmópolis. Desde ahí usted tendrá plena libertad de añadir nuevos elementos químicos a la tabla periódica.

Buena suerte y larga vida.

Mr. P dijo...

y aún hay vida por estos rumbos?